Siguiendo unos sencillos consejos podemos disminuir las probabilidades de que un ladrón de coches se apropie de nuestro vehículo

Se trata de establecer una serie de “stops“ a los delincuentes capaces de dificultarles la intención de llevarse nuestro coche.

Una de las peores sensaciones es la de llegar a coger nuestro vehículo y ver que no está aparcado donde lo dejamos. Estamos ante ese odioso momento en el que nos invaden las dudas sobre si lo estacionamos donde habíamos pensado, quizás en otro lugar o quizás la posibilidad que lo hayan robado.

Tras comprobar que el vehículo no ha sido retirado por la policía, no cabe duda de que nos han robado el automóvil.

Por ello, vamos a dar una serie de consejos o pautas para intentar disminuir las probabilidades de que nos roben el vehículo y disuadir la acción de los delincuentes.

Aparcamiento

Lo primero a evitar es facilitarle el robo al ladrón. Uno de los puntos más importantes que debemos tener en cuenta es no aparcar el vehículo en zonas mal iluminadas o de poco tránsito de personas.

Aparcar en ese tipo de zonas multiplica las probabilidades de ser robado al permitirles “trabajar” sin ser vistos.

Otro de los puntos determinantes sobre el aparcamiento es la forma de estacionar el vehículo. No es lo mismo aparcar en línea que en batería. Al aparcar en batería, los cacos pueden ocultarse más fácilmente entre los vehículos sin ser vistos. Por el contrario, al estacionar en línea, están mas expuestos a ser vistos por la policía o por los propios vecinos de la zona.

Por último, en cuanto al estacionamiento se refiere, es hacer uso del garaje si se dispone del mismo. Muchas veces, ya sea por pereza de maniobrar en la plaza o porque hay un hueco cerca en la calle lo dejamos fuera.

Lo que no se ve, no se puede robar, por lo que los ladrones al no ver tu coche en la calle no podrán robarlo. Además de las múltiples ventajas que ya de por sí tiene un garaje, como no congelarte en invierno, ni asarte en verano, ni mojarte en días de lluvia.

Antirrobo

Del mismo modo que para evitar el robo en nuestra vivienda ponemos más barreras físicas, como puertas acorazadas o cerrojos, en el vehículo debemos tomar las mismas precauciones.

Un sistema antirrobo, tipo palanca de bloqueo de volante contra el salpicadero o de los que van a los pedales, son visibles desde el exterior.

Este tipo de antirrobos no son infalibles, pudiendo ser quitados en pocos minutos por un ladrón. Pero esos minutos de más que tiene que perder en desbloquear el sistema, puede ser clave para que vaya a buscar otro vehículo que no disponga de esta barrera.

Alarma

Montar una alarma en el vehículo, en el caso de que no la trajera de origen, también es un buen método disuasorio. Todos se asoman y miran cuando una alarma de un vehículo está sonando, por lo que los ladrones suelen evitarlos.

Cortacorriente

Existen sistemas de cortacorriente que lo que consiguen es cerrar el circuito eléctrico que alimenta el motor de arranque. Con estos dispositivos se consigue que por mucho que traten de arrancar el vehículo, incluso con llave, nunca lo conseguirán, a no ser que se pulsen el botón del cortacorriente.

Este botón suele ponerse en un lugar escondido que sólo conoce el conductor.

Localizador GPS

Si todo ha fallado y han conseguido robar el vehículo, lo más útil es un localizador GPS.

Con el localizador se podrá ubicar en todo momento el vehículo, incluido el último lugar donde tuvo cobertura.

Existen varios modelos en el mercado e incluido algunos que podrían llegar a bloquear a distancia el vehículo. En portales especializados puedes encontrar localizadores GPS económicos, para vehículos, con los que podrás saber en todo momento donde está ubicado tu vehículo y hacer seguimiento de este desde tu móvil.