El pulso entre el PP y Vox se encona tras tres días de reproches cruzados. Los populares intentan esquivar el choque, pero los de Santiago Abascal no cesan en sus advertencias. Ayer en San Fernando (Cádiz) fue la secretaria general del Grupo Parlamentario Vox en el Congreso, Macarena Olona, quien marcó el ritmo frente al bajo perfil de Génova. La diputada amenazó con ni tan siquiera sentarse a negociar los Presupuestos de Andalucía, donde Vox exige un adelanto electoral hace meses.

Ello no implica, según explicó Olona en declaraciones a los medios recogidas por Ep, que Vox vaya a votar en contra de las cuentas públicas por defecto. Pero avisó de que el Gobierno de coalición de Juanma Moreno (PP) y de Juan Marín (Ciudadanos) no tendrá la oportunidad de «una negociación previa» ni de «una sonrisa» de Vox. La abstención del PP en Ceuta
ante la declaración de Abascal como persona ‘non grata’ ha molestado en Vox, que exige una rectificación. Si no, insiste, habrá un punto de inflexión en su relación.

Vox registró en Ceuta una iniciativa para revocar esa declaración sobre Abascal, pero de momento el martes la Mesa de la Asamblea ceutí evitó incluirla de urgencia en el Pleno de esta semana. «A partir de aquí, sea presupuestos o cualquier iniciativa, es votarla según sea conveniente si es bueno para los andaluces. Lo que no tendremos es una negociación previa, una sonrisa», dijo, y reclamó un adelanto electoral porque, según ella, se está poniendo en riesgo «el fin de las políticas de izquierdas» porque el PP gobierna con Cs; partido «no fiable».

«No hay decisión política»
«No es una decisión política, es un impedimento legal, el reglamento no contempla la posibilidad de presentar mociones de urgencia una vez que el Pleno está convocado y tiene fijados los puntos del día. Por lo tanto, en esto no ha habido una decisión política, es la aplicación del reglamento», explicó el presidente de Ceuta,
Juan Jesús Vivas
, en declaraciones a la Ser.

Eso sí, no aclaró qué votarán sus concejales si la propuesta de revocación llega nuevamente a la Mesa. Pero sí volvió a justificar la abstención del PP del pasado viernes porque acusa a Abascal de ir a Ceuta «en el momento más difícil de la historia reciente, cuando la soberanía de la ciudad estaba puesta en jaque por parte de Marruecos, a decir que Marruecos tenía aliados en la Asamblea».El presidente de Ceuta se ampara en el reglamento para no tramitar la moción para revocar la reprobación de Abascal

Según Olona, no es Vox quien ha «roto» relaciones con el PP sino al revés, más si cabe tras evitar que se tramite la moción para dejar sin efecto «esa declaración ignominiosa» sobre Abascal. «Es que lo están haciendo desde ese infame discurso en la moción de censura [de Vox contra Pedro Sánchez]», en la que Pablo Casado pronunció un discurso rupturista con Vox.

En Génova, sin embargo, restan importancia al posicionamiento de Vox y confían en que sea una tormenta de verano que no afecte a «los gobiernos de libertad». Ayer fue el secretario general del PP, Teodoro García Egea, quien marcó la postura de los suyos: tranquilidad y serenidad frente al marco de enfrentamiento que impone Vox.

En el PP insisten en que ellos no han «roto» nada y en que no creen en cordones sanitarios, respaldan la decisión del presidente de Ceuta y lanzan la pelota a tejado ajeno: «No sé exactamente qué efectos prácticos tienen todas estas cuestiones. Si mañana llevamos una bajada de impuestos a la Comunidad de Madrid o a Andalucía, ¿Vox va a votar en contra en función de lo que ocurra en Ceuta?», dijo García Egea por la mañana, en Antena 3.

El número dos del PP, sin dar mayor relevancia a las discrepancias, apuntó que su partido también ha recibido «palabras gruesas» y echó en cara a Vox haber llamado a Vivas y a sus consejeros «promarroquíes».