El líder de la organización era un vecino de La Coruña de 28 años de origen colombiano. Le secundaba otro joven lugués de 25, también residente en La Coruña, que se dedicaba a seguir sus indicaciones. Un tercer implicado, un venezolano de 22 años y vecino de Sada (La Coruña) en situación irregular en España, no participaba de forma directa en los asaltos; en su caso, se encargaba de proporcionar a las víctimas haciéndoles creer que les estaba presentando a posibles compradores de droga de total confianza.

Con este esquema, la noche del 6 de noviembre de 2020, los dos primeros miembros, junto a un brasileño de 22 años residente en Oleiros (La Coruña), accedieron al domicilio de la víctima, en Santa Cristina (Oleiros), vivienda que utilizaba tanto para consumir como para traficar. La víctima les abrió la puerta con total confianza al reconocer al colaborar de la banda mencionado: pensaba que en realidad iba a saldar una deuda.

Sin embargo, al abrir la puerta, tres miembros de la banda -los dos líderes y una tercera persona no identificada- le agredieron nada más entrar, le exigieron el dinero y lo amordazaron con cinta americana. Estuvieron una media hora en el domicilio, apropiándose de 8.000 euros, 50 gramos de marihuana, dos teléfonos y un altavoz y un jersey tasados en 8.258 euros.

Mientras estuvieron en el piso, y con intención de humillarlo, lo ataron por el cuello con un cable y le hicieron andar como si fuese un perro por la casa, escena que el colaborador de la banda, que conocía a la víctima, se dedicó a grabar con su teléfono móvil. Tras el asalto, los cuatro abandonaron la vivienda, dejando a la víctima atada de manos, aunque finalmente pudo librarse de la cuerda sin necesidad de ayuda. Las heridas eran leves.

Este colaborador había conocido a los dos líderes a través de un dominicano vecino de Culleredo (La Coruña) de 20 años, que también ha sido condenado. Estos le habían dicho que querían robar a la víctima y fue un hermano de este vecino de Culleredo el que los puso en contacto con el colaborador. Este joven dominicano recibió una compensación económica por la gestión y le dieron también una pequeña cantidad de droga para entregar al colaborador.

Las intervenciones telefónicas de la investigación desvelaron otros intentos fallidos ‘vuelcos’ de la banda. Pero habría uno posterior, en febrero de 2021, que sí triunfaría. Fue en un supermercado de La Coruña: golpearon a la víctima, a quien metieron a la fuerza en un coche, abandonándolo en un polígono. Le robaron 70 euros, una cadena de cuello y pertenencias de 385 euros que la víctima tenía en la furgoneta.

La Audiencia de La Coruña ha impuesto penas de entre cinco años y cuatro años y diez meses a los líderes de la banda por delitos de pertenencia a grupo criminal, robo en casa habitada, robo con violencia, lesiones y delito contra la integridad. Por otra parte, la sentencia conmuta la pena de cinco años de cárcel al joven que irrumpió en la casa con los líderes de la banda por su expulsión del territorio nacional después de que pase dos años en la cárcel -y no podrá volver a España en diez años-. En cuanto al colaborador, la sentencia le impone tres años y medio de prisión y al cómplice que le presentó a los miembros de la banda, un año y nueve meses de cárcel.