La Policía Nacional ha descartado sumisión química en los cuatro casos denunciados durante la Feria de San Francisco de Lucena (Córdoba) y Córdoba capital. Además, los análisis practicados a las posibles víctimas de pinchazos en el transcurso de un concierto de David Guetta en El Puerto de Santa María (Cádiz) han dado negativo. Se investigan aún un total de 16 casos.
En la provincia de Córdoba se habían interpuesto dos denuncias, una relativa a Lucena con tres posibles casos que fueron atendidos en el centro de salud del municipio tras haber sentido un pinchazo en una caseta de la feria en la madrugada del sábado al domingo, y otra sobre unos hechos acontecidos en la capital el pasado fin de semana. En todos ellos la Policía ha descartado la sumisión química. También en los casos denunciados en la provincia de Cádiz con resultados toxicológicos concluyentes, hasta la fecha, todos negativos.
Por el momento, el Servicio Andaluz de Salud (SAS) tiene en estudio 16 posibles casos de pinchazos en Andalucía, en las provincias de Huelva (7), Cádiz (3), Málaga (3), Almería (2) y Córdoba (1), todos ellos a la espera de los resultados del Instituto Toxicológico Nacional.
En este sentido, la consejera de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, Loles López, señaló este miércoles en una entrevista en Canal Sur Radio que tanto su consejería como la de Salud y Consumo y la de Justicia pondrán en marcha un protocolo para actuar conjuntamente ante los pinchazos a mujeres en zonas de ocio, «hechos que a todos nos están preocupando».
Por su parte, el presidente de la Federación Andalucía Noche -que aglutina las salas de fiesta y discotecas-, Juan Rambla, ha señalado que desde la organización se ha puesto en marcha un protocolo de actuación entre los miembros de seguridad, los controladores de sala y los de acceso.
Rambla ha explicado que «en el momento en el que cualquier cliente se queje de que ha recibido un pinchazo», el personal de seguridad «la llevará con el grupo de personas con las que ha asistido a la discoteca, y posteriormente esperará con ellos hasta la llegada de la Policía».
De otro lado, el catedrático de Medicina Legal por la Universidad de Granada, José Antonio Lorente, ha asegurado al respecto que «es muy difícil» que con la nueva vía de sumisión química pueda haberse generado «una sustancia que no esté controlada en los análisis toxicológicos». También ha advertido de un posible «efecto imitación» para «originar pánico».
Lorente, asignado por la Consejería de Salud y Consumo como portavoz para esta cuestión, ve «complicado pensar» que con este objeto «pueda haberse generado una sustancia nueva» que sea indetectable en las pruebas de control.
Por otro lado, sobre si realmente un pinchazo puede provocar sumisión química, el representante de la Junta ha destacado que «una cosa es pinchar y otra muy distinta es inyectar», tras añadir que inocular una cantidad suficiente para conseguir que la víctima «entre realmente» en un proceso de pérdida de conciencia o anulación de la voluntad «es realmente muy difícil».
«Estoy en contacto con la Guardia Civil y la Policía y se está empezando a sospechar que haya un perverso y criminal efecto imitación y que se esté pinchando a víctimas por el mero hecho de pinchar y originar pánico», ha apuntado.
Asimismo, Lorente ha aseverado que en España y en Europa «hay muy pocos casos donde se haya detectado algún tipo de droga que pueda estar relacionado con esto».
Alarma social y efecto llamada
El comisario provincial de Cádiz, Santos Bernal Uceda, ha explicado este jueves que los resultados de los análisis practicados a las jóvenes víctimas de la nueva variante de sumisión química «siguen siendo negativos», pese a la «alarma social» despertada ante estas prácticas, algo que a su juicio supone «el mayor problema».
En declaraciones a los periodistas, ofrecidas por la Policía Nacional sobre esta cuestión, Uceda ha aclarado que «están llegando denuncias» por estas prácticas, si bien los análisis a las personas afectadas por estas situaciones «siguen llegando negativos».
Hasta el momento, según ha manifestado, en principio habrían sido formuladas aproximadamente «siete denuncias» ante la Policía Nacional, correspondiendo la primera de ellas a una situación vivida en el concierto celebrado por el DJ David Guetta el pasado 24 de julio en el Recinto Ferial de las Banderas de Puerto de Santa María; si bien podría haber «alguna denuncia más» interpuesta ante la Guardia Civil.
En este sentido, ha señalado que «es muy difícil detener a nadie» dada la cuantía de gente que se reúne en las discotecas, puntualizando que habría que «analizar todas las cámaras de la discoteca» en la que se detectase cada una de estas situaciones, las cuales sólo controlan «las vías de entrada y no donde se baila». «Es difícil, estamos trabajando y alguna línea de investigación tenemos», ha apuntado.
El comisario, que ha alertado de que se está produciendo un «efecto llamada» y de que se está «generando alarma social» con estas prácticas, señalando así «la posibilidad de que alguien haga la gracia, dé un pinchazo con una aguja sin nada tóxico y ya se genere todo».
«Para nosotros es todavía difícil comprender la motivación final. No sólo pasa en España, también en Austria, en Bélgica o en Francia porque se ha generado esta situación. No ha habido ninguna denuncia por robo con intimidación ni por abuso sexuales», ha concluido.