El objetivo de los robos eran las cajas fuertes de los huéspedes. Así desvalijaba hoteles de lujo una banda de argelinos que cometía sus robos en España y Francia: se hacían pasar por turistas para entrar en los hoteles, entraban en las habitaciones por el método del «resbalón» y robaban todo el dinero y joyas de las víctimas. De esta forma cometieron una docena de robos en hoteles de España y Francia.

En las imágenes, tomadas durante el asalto a varios apartamentos de un hotel de lujo de Chiclana (Cádiz), se puede ver en acción al cabecilla del grupo. Un activo delincuente argelino de nacionalidad francesa que se ocultaba detrás de nueve identidades diferentes.

Fue este vídeo el que dio pie al inicio de la operación «Ébano azul» el pasado mes de agosto. Las imágenes dejan constancia de que los miembros de la banda tenían habilidad para abrir las cajas fuertes de seguridad y pertenecían al mundo del crimen organizado.

Siempre actuaban de igual forma: el grupo vigilaba los hoteles de lujo para cometer los robos, y tras comprobar que los huéspedes no estaban en las habitaciones, entraban en el hotel haciéndose pasar por turistas. Una vez dentro conseguían acceder a las habitaciones con llaves falsa o usando el método del «resbalón» abriendo las puertas con una tarjeta de crédito.

Ya dentro, abrían las cajas fuertes robando todo lo que encontraran en su interior y salían del hotel con la misma discreción con la que habían entrado.

Los guardias pronto descubrieron que la base de operaciones de la banda estaba en Marbella. Allí, en un chalet de lujo donde aparentaba vivir con su familia de vacaciones, encontraron al cabecilla de la banda.

En el registro, los guardias recuperaron todos los objetos robados en Chiclana, además de documentación falsa que servía al jefe de la banda de argelinos para mantener nueve identidades diferentes en España, Francia, Bélgica o Alemania. En esos países amontonaba una gran cantidad de antecedente pero siempre a nombre de las diferentes identidades falsas que representaba. Durante la detención, los guardias encontraron un doble fondo con dos bolsas llenas de artículos producto de los robos por valor de más de 750.000 euros.

Tras pedir la colaboración de la Policía francesa y de EUROPOL, se consiguió detener a sus cómplices en Francia.

El grupo habría cometido al menos 12 robos en España y Francia, haciéndose con un botín por valor de 4’5 millones de euros. En España se han esclarecido cinco robos en Chiclana de la Frontera.