CCOO-Hábitat ha remitido un escrito a la dirección de la GAI de Guadalajara y al delegado de la Junta en la provincia denunciando «una vez más los incumplimientos laborales y salariales de la empresa Ariete Seguridad» y pidiendo que tengan en cuesta estas cuestiones a la hora de redactar los pliegos para volver a sacar a concurso, en los próximos meses, la contrata de la vigilancia y seguridad del hospital universitario y de los centros sanitarios asociados, más la ampliación del hospital recientemente puesta en servicio.

En un comunicado, el sindicato ha señalado que Ariete Seguridad, que en la actualidad emplea a unas 25 personas en Guadalajara, fue «una de las que se aprovecharon la reforma laboral del PP para descolgarse del convenio colectivo de aplicación, en su caso el convenio estatal de empresas de seguridad, e imponer su propio convenio de empresa, para competir así con el resto de empresa del sector con salarios más bajos y peores condiciones laborales».

El convenio en cuestión fue denunciado por CCOO y finalmente anulado por el Tribunal Supremo, si bien cuatro años después Ariete Seguridad «sigue demorando el abono de las diferencias salariales que arrastramos desde 2018», unos 1.200 euros a cada trabajador, tal y como ha señalado el delegado sindical de CCOO-Hábitat en esta empresa, Juan Pérez.

«Tampoco paga las horas extraordinarias según lo establecido en convenio; ni facilita el registro horario (fichajes) ni la relación de las horas extraordinarias que se realizan, tal y como marca el ultimo real decreto 8/2019 de 8 de marzo», ha precisado, asegurando que la empresa «mantiene, además, una doble escala salarial, al no abonar, a quienes se han incorporado a la plantilla tras asumir el servicio Ariete Seguridad, los 66 euros/mes del Complemento de Puesto de Trabajo acordado en 2008».

Además de las cuestiones salariales, la empresa «impone y dispone de forma unilateral los calendarios laborales», según el sindicato, que señala que lo hace «incumpliendo tanto la obligación de negociarlos como la de entregarlos con tiempo y en forma, lo que supone que los trabajadores tiene que estar siempre pendientes, incluso en sus días libres, de que la empresa les llame a incorporarse con apenas unas horas de antelación, y con la amenaza de sanciones».

CCOO-Hábitat recuerda que viene trasladando estas denuncias desde hace años tanto a la dirección de gestión del hospital como a la delegación de la Junta «sin que ni nos hayan manifestado ninguna solución al respecto en todo este tiempo, lo que está llevando a la plantilla a una situación de decepción, desilusión y hartazgo, al sentirse abandonada por la Administración titular del servicio y responsable subsidiaria de las contratas adjudicatarias».

De ahí que el sindicato vuelva a pedir ahora a los responsables del Gobierno de Castilla-La Mancha y del Sescam que, a la hora de volver a sacar a concurso la vigilancia y seguridad de los centros sanitarios de la GAI de Guadalajara, tengan en cuenta la «mala praxis de esta empresa y su reiterado incumplimiento del ordenamiento jurídico en material laboral y sindical», así como del Acuerdo de Estabilidad en las Contratas de la Junta.

«Además de poner en conocimiento nuestra preocupación por la posible renovación y ampliación de una contrata de la Junta a una empresa incumplidora, también pedimos que a la hora de elaborar los pliegos de condiciones y a la hora de adjudicar el contrato, no solo se tenga en cuenta la oferta económica y los requisitos habituales en las condiciones técnicas, si no también la trayectoria que esta empresa ha mantenido desde el principio en este servicio», conclyen.