El Mando Operativo Aeroespacial ha concluido la activación Eagle eye 21-02, desarrollada entre el 21 y el 24 de junio en el sur de la península ibérica en el marco de las operaciones permanentes de las Fuerzas Armadas, que se llevan a cabo las 24 horas del día los 365 días del año.

La activación Eagle eye 21-02 tiene como objetivo asegurar la coordinación de todas las capacidades y la eficiencia del Sistema de Defensa Aeroespacial nacional. De este modo, las unidades del Ejército del Aire, Ejército de Tierra y Armada trabajan de forma conjunta para garantizar la vigilancia y defensa aeroespacial del territorio nacional, contribuyendo al dispositivo de policía aérea, interceptando, identificando y, en caso necesario, interviniendo las trazas que se le asignen.

Las fuerzas implicadas han incluido, por parte del Ejército del Aire, la participación de seis aviones de combate Eurofighter Typhoon del Ala 11, además de la Jefatura del Sistema de Vigilancia y Control Aeroespacial (JSVICA) y sus unidades, destacando el Grupo Norte de Mando y Control (GRUNOMAC), ubicado en la Base Aérea de Zaragoza. En total se han realizado el 100% de salidas asignadas, acumulando más de 74 horas de vuelo.

Por parte del Ejército de Tierra, la Unidad de Defensa Antiaérea Aníbal (UDAA) ha desplegado de forma exitosa en la Base Naval de Rota con la finalidad de integrarse en el Sistema de Defensa Aeroespacial (SDA). Para realizar tal integración, la Unidad de Transmisiones del Mando de Artillería Antiaérea (UTMAA) ha establecido los enlaces pertinentes entre el Centro de Operaciones de Artillería Antiaérea Semiautomático Medio (COAAAS-M) y el Grupo Norte de Mando y Control del Ejército del Aire. Además, el COAAAS-M ha integrado los sistemas de Armas MISTRAL y SKYDOR-35/90 (Fuencarral-Madrid), NASAMS (Cartagena) y HAWK (Sevilla), con sus respectivas unidades de sensores, con el objetivo de tener una mayor cobertura del espacio aéreo de soberanía.

Por parte de la Armada, la capacidad antiaérea de la fragata Blas de Lezo, junto con la interoperabilidad de los sistemas de mando y control empleados, ha permitido incrementar el rango efectivo de gestión del espacio aéreo controlado por el Sistema de Defensa Aéreo Nacional. Se trata de un buque multipropósito, en el que destaca su gran capacidad antiaérea y de buque de mando. Su role como escolta moderna está ampliamente cubierto, siendo su capacidad antiaérea la que guio su construcción y diseño, lo que lo convierte en uno de los mejores escoltas a nivel mundial.

Asimismo, aprovechando la coincidencia de la activación ‘Eagle Eye 21-02’ con el Ejercicio Sirio 21 del Mando Aéreo de Combate del Ejército del Aire, se ha generado un escenario más completo para ambas actividades, consiguiendo aprovechar la capacidad de integración de medios para contribuir al entrenamiento de todas las unidades participantes.

Las activaciones Eagle eye, lideradas por el Mando Operativo Aeroespacial, ponen de manifiesto la alta capacidad de las Fuerzas Armadas para contribuir a la seguridad y defensa de España, mediante la sinergia de sus unidades y medios, alcanzando un alto grado de entrenamiento y operatividad, a la vez que se mantienen las medidas de prevención establecidas frente a la COVID-19.